El conflicto en el Sáhara Occidental, que ha enfrentado a Marruecos y al Frente Polisario, apoyado por Argelia, desde 1975, sigue siendo una de las disputas territoriales no resueltas más antiguas. Ante el estancamiento diplomático, el enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura, habría sugerido la partición como una solución potencial. Esta propuesta controvertida destaca los desafíos continuos para llegar a un compromiso aceptable para todas las partes involucradas. Contexto histórico y estancamiento diplomático El Sáhara Occidental ha sido reclamado por Marruecos desde 1975, tras la retirada de las fuerzas coloniales españolas. Marruecos propone un plan de autonomía bajo su soberanía, apoyado por Francia, mientras que el Frente Polisario aboga por un referéndum de autodeterminación que incluya la opción de independencia. Las resoluciones de la ONU y la mediación internacional no han logrado encontrar una solución consensuada al conflicto, sumiendo a la región en un estancamiento